Varicocele Testicular

El varicocele está presente en un 15%-20% de la población masculina y es una de las causas de infertilidad, entre el 35% y el 80%.

¿Qué es el varicocele masculino?

Es la dilatación anormal del sistema venoso que drena la sangre de los testículos. Podríamos definirla de forma sencilla como varices de origen pélvico que afectan a los testículos.

Esta afección produce aumento de la temperatura de la zona genital y atrofia testicular (disminución del tamaño del testículo), y con ello influir en la disminución de la producción de espermatozoides y testosterona, afectando a la fertilidad masculina.

Causas

¿Cuáles son las causas del varicocele?

Las causas del varicocele son diversas, se barajan factores anatómicos. Es más común en el lado izquierdo, donde la vena espermática drena en la vena renal. 

Además, en algunas ocasiones, está involucrada la compresión de la vena renal izquierda, síndrome de Nutcracker, que desarrolla una hipertensión y reflujo en la vena gonadal, desecandenando las varices en el escroto.

¿Cuáles son los síntomas?

En los estudios de fertilidad masculina se debe descartar la presencia de varicocele y si existe debe ser tratado.

Sensación de pesadez, dolor o molestias en la zona escrotal, estos síntomas suelen aumentar a lo largo del día, empeorar al estar de pie y disminuir al estar sentado o tumbado.

Incomodidad durante o posterior a las relaciones sexuales.

Está asociado a infertilidad.

Puede estar asociado a varices en las piernas.

Dx

¿Cómo se diagnostica?

Su diagnóstico se puede realizar en la exploración física de los genitales o ecográficamente.

El varicocele se clasifica en distintos grados en función de la visualización o palpación de las venas varicosas en el escroto. El estudio se continúa haciendo un Eco-Doppler testicular, que es una técnica no invasiva que nos proporciona valiosa información.

¿Cuál es el tratamiento del varicocele?

Existen dos opciones terapéuticas, una que se denomina varicocelectomía que es una técnica invasiva que requiere “realizar incisiones” en el abdomen con ligadura local de la vena. La recuperación suele ser paulatina y el mayor inconveniente es el riesgo a recidiva.

La otra alternativa es una técnica endovascular. Se realiza mediante una flebografía de confirmación diagnóstica y procedimiento terapéutico de embolización en el mismo acto. Es una técnica mínimamente invasiva, se accede a través de una vena del brazo y permite visualizar la morfología de la vena renal, de la vena gonadal, comprobando si es única o está formada por varias ramas lo que indicará la necesidad de tratar cada una de ellas y conseguir una completa oclusión. Al contrario que en el tratamiento quirúrgico, esta técnica actúa sobre todo el eje venoso y sus ramas colaterales permitiendo reducir considerablemente la posibilidad de recidiva.

El tratamiento se denomina “embolización” que consiste en ocluir selectivamente las venas enfermas, mediante la colocación de dispositivos metálicos llamados coils, también puede requerir el uso de fármacos esclerosantes.

En nuestra unidad contamos con amplia experiencia en el tratamiento endovascular, con personal especializado y altamente cualificado.

Varicocele-antes

ANTES

Varicocele-despues

DESPUÉS

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